La mayoría de mis pacientes descubren que están embarazadas entre la 5ta a 6ta semana de gestación, al saberlo les inunda una emoción indescriptible… muchas lo describen como una felicidad extrema, tan extrema que se siente como un sueño, algunas inclusive me han dicho: es que se siente irreal!
Otras veces ocurre que aunque no sientan esta felicidad instantánea la van desarrollando al pasar el tiempo y van construyendo un amor que a la final termina siendo igual… indescriptible. Lo que te quiero decir con esto es que sean cuales son tus sentimientos, te inunda una ola de emociones y al pasar los días gran parte de esas emociones se convierten en ansiedad y miedo, si esto te pasó o te está pasando en este momento quiero pedirte que dejes de leer por 30 segundos y respires profundamente tres veces, no estás sola!
Es muy probable que los pensamientos que te llevaron a sentirte así es saber si tú bebé está sano, y la realidad es que lo más probable es que todo esté bien.
Ahora bien, debemos señalar que durante el embarazo cada semana es importante y debemos cuidarla y además inclusive después del parto dónde inicia el periodo de lactancia materna debemos de tener un cuidado especial.
Hay una frase famosa que dice que ¨el amor entra por la boca ¨, en realidad ésta no pudo haber sido más acertada porque la forma en que te alimentas durante el embarazo puede influir positivamente en el desarrollo de tu bebé, de hecho es aun más fascinante, porque no solo influye durante el embarazo si no que sus efectos se quedan hasta después de su nacimiento, esto es lo que conocemos programación del desarrollo, que es la capacidad que obtuvimos en el vientre de mamá de adaptarnos ante las influencias externas, esa adaptación influye en la vida fuera del útero y puede hacer que nuestra respuesta sea muy favorable para crecer saludables y disminuir el riesgo de muchas condiciones de salud como la obesidad infantil, resistencia a la insulina que conlleven a problemas de glicemia e inclusive hasta el modo en que se van desarrollando las neuronas en nuestro cerebro.
Por eso es tan importante la nutrición durante el embarazo y la lactancia, es el motivo por el cual tus doctores siempre están pendientes cuánto peso has ganado y si estas comiendo todos los nutrientes que necesitas.
Al tener una dieta balanceada, equilibrada, suficiente en proteínas, rica en omega 3, acido fólico, hierro y preferir alimentos integrales, frutas y vegetales puedes aportarle a tu bebé muchos beneficios y a tu salud también, recuerda que las dietas ricas en azucares y una ganancia de peso excesiva te pueden poner en riesgo de sufrir Diabetes Gestacional que puede tener consecuencias no deseadas e incluso pudieran aumentar tu riesgo a sufrir diabetes después del parto.
Hay un fenómeno muy interesante que ocurre después del parto, y si estás embarazada quizás este consejo te caiga como anillo al dedo, muchas de mis pacientes me comentan post parto: ¨ ahora sí que voy a comerme TODO! ¨. Lo más lindo comienza justo en ese momento, donde ya puedes verle la cara a tu bebé y alimentarlo si es posible por lactancia materna, en esta etapa estarás quemando incluso más calorías que en el embarazo y continúa el desarrollo del bebé, todo lo que el necesita lo obtendrá de ti. De ahí la importancia de mantener una buena alimentación y de ser posible acompañada de un nutricionista o nutriólogo. Siempre que vayas a comer recuerda que tu bebé puede percibir los sabores de tu alimentación y sus nutrientes son tus nutrientes.
Por eso me gustaría recalcar nuevamente que la frase ¨ el amor entra por la boca ¨ se ha convertido en mi favorita en las consultas prenatales y de lactancia, no la olvides nunca!
AUTOR: Dra. Viviana Hernández Ferrer, Nutrióloga Clínica
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